No Es Obligatorio Tener Una Poliza Pero Es Mejor Precaver

La mayoría de las personas desconocen que cerca de 9 de cada 10 vehículos que transitan por las calles de Puerto Rico no tienen una póliza de seguros para cubrir las lesiones corporales de un ser humano, en la eventualidad que ocurra un accidente.

Existe la creencia de que el Seguro Compulsorio o ACAA van a cubrir todo, lo cual no es correcto.  Es más, la cubierta de dichas entidades es bastante limitada.  Basta con preguntarle a cualquier familiar o amigo que haya pasado por un accidente y lo confirmará.

Lo cierto es que cuando ocurre un accidente y la parte negligente causa lesiones corporales a la otra parte, y esa persona negligente tiene un seguro privado, (distinto al Seguro Compulsorio), esos daños serían compensados por la aseguradora.  Pero la pregunta clave es ¿qué pasaría si la persona negligente que causa el accidente no tiene una póliza privada?  La contestación es simple.  Si la persona negligente no quiere pagar de forma voluntaria, la persona que sufre el accidente puede proceder con la radicación de una demanda para cobrarle hasta el último centavo de sus daños, incluyendo las lesiones, los honorarios de abogados y cualquier otro costo envuelto en el litigio.  Inclusive podría embargar sus bienes.

Hay expertos que catalogan a las personas que causan accidentes, y que no tienen una póliza de seguros privada para cubrir los daños al cuerpo de otra persona, como individuos irresponsables porque no han pensado en el prójimo.

El problema de la ausencia de seguros para cubrir los daños de terceros es tan importante para los Estados Unidos que ya 47 estados han hecho compulsorio el que los ciudadanos tengan que tener una póliza de seguros en todos sus vehículos de motor para cubrir lesiones que puedan causar a terceros.  Inclusive, en Carolina Del Norte, si el ciudadano no tiene seguro privado para cubrir la lesiones corporales causadas a terceros, ni siquiera le expiden la licencia de conducir.

En conclusión, nadie sabe cuándo será objeto de un accidente y sufra lesiones en su cuerpo.  Asimismo, nadie sabe cuándo le causará una lesión a otra persona por un accidente y termine demandado y sin casa.

Tal vez una póliza de seguros privada no puede devolverle a las personas su salud anterior, pero le ayudará a obtener cierto grado de paz y calidad de vida, dentro del estado físico en el que quedó.  Es mejor precaver que lamentar.